Desterré la ilusión que me
hacía soñar
porque el sueño eras tú.
Pero el anhelo acogió
nuevas quimeras
porque la fantasía soy yo.
Corté las alas que me
hacían volar buscando el cielo
porque el cielo eras tú.
Pero las alas crecieron
nuevamente
porque el universo es mío.
Cerré los caminos que
llevan al despeñadero de la tristeza
porque la tristeza eras
tú.
Pero la alegría creó
nuevos caminos
porque la felicidad soy yo.
Narcoticé el cerebro para
que no dejarlo pensar
porque el pensamiento eras
tú.
Pero la rebeldía despertó
la mente
porque el pensamiento es
mío.
Derrumbé el puente que lleva
a la frontera de la desilusión,
porque la desilusión eras
tú.
Pero el coraje edificó uno
nuevo,
porque la ilusión soy yo.
Insensibilicé al corazón
para que no sintiera amor,
porque el amor eres tú.
pero el corazón inventó
nuevos sentimientos,
porque el amor es mío.
Y quise poner fin a la
existencia
porque la vida eras tú.
Pero la fortaleza me hizo
ver que la vida soy yo.