jueves, 13 de marzo de 2014

Dedicatoria


Repentinamente me encuentro analizando mi vida y no sé por qué. Será tal vez porque de pronto los años han empezado a pesarme, o las enfermedades me hacen creer que ya no me queda tanto tiempo o, simplemente porque dispongo de más tiempo para pensar. Lo cierto es que  llegan a mi mente cientos de recuerdos que giran como un enorme remolino que revuelve cada rincón  de mi cerebro y saca a flote hasta aquellos momentos más ocultos, escondidos y olvidados.
Siento unas ganas locas por contar todo cuanto he vivido aunque no sea nada importante, en realidad no hice de mi paso por este mundo nada digno de contar y aún así me gustaría que al menos de esta manera puedan mis hijos conocer un poco a la mujer que fue su madre, porque ha de llegar el momento en que surjan muchas interrogantes y descubran que realmente he sido una desconocida para ellos, lo sé porque yo misma me he dado cuenta que realmente no conocí a mi madre, y esto es una de las cosas que más tristeza me dan.
Me gustaría empezar por el principio aunque no logro comprender bien cuál es ya que en mi largo camino ha habido muchas historias con  principios y finales.
Mientras alcance el tiempo iré contándoles mis experiencias, mis logros y  fracasos, mis sueños e ilusiones, mis alegrías y mis más grandes tristezas.

Estas historias del alma van dedicadas a mis hijos: Israel, Javier Alberto, Jorge Ernesto y Marco Antonio. 

3 comentarios:

  1. Ole ole y ole mi lindisima Pilar! Me quedo por aqui, yo tambien quiero conocerye bien porque en mi vida Si has dejado una gran huella!
    Eres grande mi niña y aunque nos conocemos en la distancia te quiero un monton!
    besos desde girona de ester

    ResponderBorrar
  2. Ester muchas gracias por lo que me dices, igual te aprecio mucho. un abrazo y gracias por llerme

    ResponderBorrar